Santa Fe enfrenta una situación educativa preocupante: los últimos estudios revelan que un porcentaje importante de estudiantes todavía no logra alcanzar niveles mínimos de lectura, que muchos no completan la secundaria en tiempo y forma, y que las trayectorias escolares muestran demoras o interrupciones. Estos datos ponen en evidencia brechas estructurales que requieren respuesta urgente desde diferentes actores del sistema educativo.
Principales hallazgos
1. Alfabetización en los primeros grados
- En la evaluación Aprender Alfabetización 2024, solo 41 % de los alumnos de tercer grado en Santa Fe alcanzó los niveles de lectura esperados para su edad.
- Al mismo tiempo, el 15,9 % de esos estudiantes se ubica por debajo del mínimo esperado: o no puede leer textos simples o apenas empieza a identificar oraciones básicas.
- Otra evaluación local, la *Evaluación Santafesina de Lectura 2024, refleja que apenas 25,2 % de los chicos (al cierre del segundo grado) leen con un nivel fluido o adecuado; casi tres cuartas partes están por debajo de ese estándar.
2. Trajectoria escolar: tiempo y forma
- En el departamento La Capital (Santa Fe), solo el 42 % de los alumnos llega a sexto grado en tiempo y forma, es decir, ni repitientes ni con aprendizajes claramente satisfactorios en Lengua y Matemática. Rosario muestra cifras similares.
- A nivel provincial, y de acuerdo con informes del Observatorio de Argentinos por la Educación, solo 10 de cada 100 estudiantes terminan la escuela secundaria en tiempo y forma. Esto implica que la gran mayoría tiene retrasos, repeticiones o abandona antes del final.
3. Desigualdad y disparidades
- Hay diferencias importantes según el nivel socioeconómico, gestión de escuela (privada vs pública) y territorio. Los estudiantes de contextos más vulnerables o de escuelas estatales presentan peores desempeños en las pruebas de lectura.
- La participación, aunque alta en algunas evaluaciones, no se traduce automáticamente en aprendizaje adecuado.
Causas señaladas
Al revisar los informes y declaraciones oficiales se identifican varios factores que podrían estar incidiendo:
- Insuficiente apoyo en los primeros grados al momento de consolidar la lecto-escritura: falta de programas focalizados, capacitación docente, materiales adecuados, intervenciones tempranas.
- Repitencia y demoras en el avance curricular que atrasan trayectorias escolares.
- Inequidad socioeconómica: niños con menos recursos, en zonas rurales o de periferia urbana, enfrentan más barreras.
- Servicios de salud, nutrición, infraestructura y otros factores extrínsecos (hogar, condiciones de estudio) que también influyen en la capacidad de aprendizajes.
Lo que está en juego
El fracaso escolar temprano no solo tiene consecuencias educativas, sino también sociales, económicas y culturales:
- Quién no logra leer bien a tercer grado tiene muchas más probabilidades de repetir o abandonar más adelante.
- Los retrasos en primaria inciden directamente en la culminación de la secundaria, las oportunidades de estudio superior o inserción laboral.
- La sociedad en general pierde si una parte sustancial de su población no alcanza competencias básicas.
¿Qué proponen las autoridades?
Algunas de las iniciativas que se han planteado o están en marcha:
- Planes provinciales de alfabetización temprana, que duplican esfuerzos para llegar a más niños en 1º y 2º grado.
- Evaluaciones locales censales de lectura para diagnosticar con precisión los niveles y orientar intervenciones.
- Políticas para reducir la repitencia y acompañar trayectorias escolares, con apoyos pedagógicos, refuerzos y seguimiento individual.
Conclusión:
Santa Fe se encuentra en un momento clave: los datos educativos muestran que los primeros años escolares no están asegurando el aprendizaje mínimo requerido para avanzar con éxito. La alfabetización, el seguimiento de los estudiantes, la equidad educativa y la eficiencia del sistema educativo son los ejes centrales que demandan acción. Si no se revierten estas tendencias, las desigualdades educativas tenderán a ampliarse, y las consecuencias se verán no sólo en números sino en vidas: en oportunidades truncadas, en desigualdad social y en menor capital humano para la provincia.