En un contexto donde los accidentes de tránsito siguen siendo una de las principales causas de muerte en muchos países de Latinoamérica, el uso correcto de elementos de seguridad como el casco en motocicletas y el cinturón en automóviles puede marcar la diferencia entre la vida y la muerte.
El casco, un escudo para los motociclistas
El casco no es solo una obligación legal, sino una herramienta vital para reducir lesiones graves en la cabeza. Según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), usar casco reduce en un 40% el riesgo de muerte y en un 70% el riesgo de lesiones graves en caso de accidente.
¿Cómo usarlo correctamente?
- Debe ser homologado (cumplir con normas de seguridad como DOT, ECE o Snell).
- Debe ajustarse correctamente a la cabeza: ni suelto ni apretado.
- El cierre debe estar siempre abrochado. Un casco desabrochado puede salir despedido en un choque.
- Reemplazarlo si ha sufrido un golpe fuerte, incluso si no hay daños visibles.
“Muchos motociclistas lo llevan solo por evitar una multa, pero no lo abrochan o usan modelos inadecuados, lo que es igual a no llevar nada”.
El cinturón, para todos los ocupantes del vehículo
En los automóviles, el cinturón de seguridad es obligatorio tanto en los asientos delanteros como traseros. A pesar de ello, su uso en las plazas traseras sigue siendo bajo, especialmente en trayectos cortos o urbanos.
El cinturón reduce en un 50% la posibilidad de muerte en caso de accidente. Además, evita que los ocupantes sean despedidos del vehículo o se golpeen contra el tablero o los asientos delanteros.
Consejos clave de uso:
- Debe colocarse ajustado al cuerpo, sin holguras.
- No debe pasar sobre objetos duros (celulares, llaves) que puedan dañar el cuerpo en un impacto.
- En mujeres embarazadas, debe usarse con la banda inferior por debajo del vientre y la superior entre los senos.
- En niños, se deben utilizar sillas infantiles homologadas, según el peso y la edad.
La responsabilidad es de todos
Tanto conductores como acompañantes tienen la responsabilidad de proteger su vida y la de los demás. Las autoridades insisten en que más allá de las multas, el uso de casco y cinturón debe ser una conducta automática y consciente.
“No se trata solo de cumplir con la ley, sino de cuidarnos y cuidar a quienes nos rodean. Cada decisión cuenta cuando hablamos de seguridad vial”.