El Día de la Infancia, celebrado en 18 de agosto, ha demostrado ser un período significativo para el análisis del comportamiento de consumo. En este año, se ha observado una caída notable en el gasto en comparación con años anteriores.
Varios factores podrían estar influyendo en esta disminución. En primer lugar, el contexto económico actual, caracterizado por la inflación y la incertidumbre financiera, ha reducido el poder adquisitivo de las familias. Esto ha llevado a un enfoque más conservador en las compras y en la celebración de eventos.
Además, el cambio en las prioridades de gasto, con un mayor énfasis en necesidades básicas y ahorro, ha modificado el patrón de consumo en este día especial. Las tendencias actuales muestran que las familias están priorizando experiencias y celebraciones más económicas en lugar de gastar en productos y regalos costosos.
Por otro lado, el impacto de las campañas de concientización y el aumento de la oferta de actividades gratuitas o de bajo costo también podrían estar contribuyendo a esta tendencia. Las alternativas accesibles están ganando popularidad, lo que ha llevado a una reducción en el gasto tradicional.
Es importante para los analistas y responsables de marketing considerar estas variables al planificar estrategias para futuras celebraciones del Día de la Infancia, adaptando las ofertas y campañas para alinearse con las nuevas prioridades y comportamientos del consumidor.
Según CAME, Las ventas por el Día del Niño cayeron 14,4% frente al año pasado
Fue una semana en la que las familias se orientaron a buscar productos económicos o en oferta
Se observó un consumo más cauteloso que el del año anterior, donde las prioridades se orientaron hacia lo esencial y funcional
El movimiento más fuerte se dio el sábado, día en que los comercios marcaron la diferencia, ya que para muchos los días previos habían sido similares a una jornada habitual
De todos modos, para la mitad de los comerciantes consultados el magro resultado de la fecha no sorprendió y estuvo dentro de las expectativas, aunque otro 25% señaló que fue peor o mucho peor a lo esperado y 26,9% opinó que fue mejor o mucho mejor.
El ticket de ventas promedió los $ 31.987, un 165% más que en la última medición, muy por debajo de la inflación anual, lo que refleja cómo el ajuste en las compras se hizo más por valor que por unidades adquiridas
Este año el 60,4% de los comercios realizó alguna promoción, 10 puntos por encima del año pasado, cuando sólo 50% habían apelado a ese recurso que en la Argentina se vuelve más abundante en épocas de poca demanda
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